Evangelio del día + breve explicación en un minuto.
La Iglesia antes de ser evangelizadora y caritativa es escuchadora de la Palabra.
¡Dichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la cumplen como María de Nazaret! Gracias por tu visita. Si te ha gustado añade me gusta. Compártelo en las redes.
La Palabra de Dios es viva y eficaz, más tajante que espada de doble filo, que ilumina la vida de cada hombre y mujer creyentes. Bien sabemos que «el plan de la revelación se realiza por obras y palabras intrínsecamente ligadas…y la verdad profunda de Dios y de la salvación del hombre que transmite dicha revelación, resplandece en Cristo, mediador y plenitud de toda la revelación» (D.V. 2).
57A
Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. 58Se
enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran
misericordia, y se alegraban con ella. 59A
los ocho días vinieron a circuncidar al niño, y querían llamarlo Zacarías, como
su padre; 60pero
la madre intervino diciendo: «¡No! Se va a llamar Juan». 61Y
le dijeron: «Ninguno de tus parientes se llama así». 62Entonces
preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase. 63Él
pidió una tablilla y escribió: «Juan es su nombre». Y todos se quedaron
maravillados. 64Inmediatamente
se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios. 65Los
vecinos quedaron sobrecogidos, y se comentaban todos estos hechos por toda la
montaña de Judea. 66Y
todos los que los oían reflexionaban diciendo: «Pues ¿qué será este niño?».
Porque la mano del Señor estaba con él.
Estamos ya en las puertas de la Navidad. Estamos cerca de la Navidad y continuamos la Feria Mayor que nos conduce directamente a la Navidad.
La Navidad se enmarca en dos direcciones: Uno que abaja al Dios vivo hacia el hombre asumiendo la pobreza y la debilidad de la finitud, y otro que hace elevar al hombre hacia la esfera de Dios como un gran camino de divinización.
En el Evangelio de este día de la Feria Mayor de Adviento leemos el Evangelio de San Lucas (Lc 1,57-66).
Zacarías e Isabel serán bendecidos con la donación de un hijo, al que llamarán Juan, que significa "Dios es favorable", y advierten en lo más profundo de su corazón que Dios "ha hecho gran misericordia con ellos".
¡Gracias, Señor, por el don maravilloso de la fe de Zacarías e Isabel para abrirse a tu plan de salvación. Su confianza y su fe en el Dios de sus padres nos ayudan a nosotros para abrirnos a su presencia y a tu gracia!
LIBROS DE FRANCISCO BAENA CALVO EN BUBOK
CANAL DE FRANCISCO BAENA CALVO EN YOUTUBE