INTRODUCCIÓN AL BLOG
Evangelio del día + breve explicación en un minuto.
La Iglesia antes de ser evangelizadora y caritativa es escuchadora de la Palabra.
¡Dichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la cumplen como María de Nazaret! Gracias por tu visita. Si te ha gustado añade me gusta. Compártelo en las redes.
La Palabra de Dios es viva y eficaz, más tajante que espada de doble filo, que ilumina la vida de cada hombre y mujer creyentes. Bien sabemos que «el plan de la revelación se realiza por obras y palabras intrínsecamente ligadas…y la verdad profunda de Dios y de la salvación del hombre que transmite dicha revelación, resplandece en Cristo, mediador y plenitud de toda la revelación» (D.V. 2).
19Vinieron
a él su madre y sus hermanos, pero con el gentío no lograban llegar hasta
él. 20Entonces le avisaron:
«Tu madre y tus hermanos están fuera y quieren verte». 21Él
respondió diciéndoles: «Mi madre y mis hermanos son estos: los que escuchan la
palabra de Dios y la cumplen»
Celebramos el Martes de la Vigésimo Quinta Semana del Tiempo Ordinario.
Hoy la Iglesia celebra la fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes, equivalente al nombre de Virgen de la Misericordia. Se la llama también Generala de los Ejércitos Celestiales, la Mujer Vestida de Sol y la Reina de la Paz.
Se dice que el 1 de agosto de 1218, fiesta del santo fundador Pedro Nolasco tuvo una visita de la Santísima Virgen, dándose a conocer como La Merced, que lo exhortaba a fundar una Orden religiosa con el fin principal de redimir a aquellos cristianos cautivos. En ese momento, la península Ibérica estaba dominada por los musulmanes, y los piratas sarracenos asolaban las costas del Mediterráneo, haciendo miles de cautivos a quienes llevaban al norte de África.
En el Evangelio de este Martes de la XXV Semana del Tiempo Ordinario leemos el Evangelio de San Lucas (Lc 8,19-21).
Jesús subraya que su verdadero parentesco no es el carnal, sino de índole espiritual: “Mi madre y mis hermanos son aquellos que oyen la Palabra de Dios y la cumplen”. Efectivamente, la que mejor oyó y cumplió la Palabra fue su Madre, María de Nazaret.
Su verdadera familia son aquellos que llevan a la práctica su mensaje y son aquellos que dan frutos, según la parábola del sembrador, y los que iluminan a los demás, según la imagen de la lámpara.
¡Ven, Señor Jesús, y destruye nuestros miedos para que podamos pertenecer a tu verdadera familia y entregarnos a Ti sin resistencias! Amén.
LIBROS DE FRANCISCO BAENA CALVO EN BUBOK
CANAL DE FRANCISCO BAENA CALVO EN YOUTUBE