Evangelio del día + breve explicación en un minuto.
La Iglesia antes de ser evangelizadora y caritativa es escuchadora de la Palabra.
¡Dichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la cumplen como María de Nazaret! Gracias por tu visita. Si te ha gustado añade me gusta. Compártelo en las redes.
101Después
de esto, designó el Señor otros setenta y dos, y los mandó delante de él, de
dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. 2Y les
decía: «La mies es abundante y los obreros pocos; rogad, pues, al dueño de la
mies que envíe obreros a su mies. 3¡Poneos en camino! Mirad que os envío como corderos en medio
de lobos. 4No llevéis bolsa, ni alforja, ni sandalias; y no saludéis a
nadie por el camino. 5Cuando entréis en una casa, decid primero: “Paz a esta
casa”. 6Y si allí hay gente de paz, descansará sobre ellos vuestra
paz; si no, volverá a vosotros. 7Quedaos en la misma casa, comiendo y bebiendo de lo que
tengan: porque el obrero merece su salario. No andéis cambiando de casa en
casa. 8Si entráis en una ciudad y os reciben, comed lo que os
pongan, 9curad a los enfermos que haya en ella, y decidles: “El reino
de Dios ha llegado a vosotros”. 10Pero si entráis en una ciudad y no os reciben, saliendo a sus
plazas, decid: 11“Hasta el polvo de vuestra ciudad, que se nos ha pegado a los
pies, nos lo sacudimos sobre vosotros. De todos modos, sabed que el reino de
Dios ha llegado”. 12Os digo que aquel día será más llevadero para Sodoma que para
esa ciudad. 17Los setenta y dos volvieron con alegría diciendo: «Señor,
hasta los demonios se nos someten en tu nombre». 18Él les
dijo: «Estaba viendo a Satanás caer del cielo como un rayo. 19Mirad: os
he dado el poder de pisotear serpientes y escorpiones y todo poder del enemigo,
y nada os hará daño alguno. 20Sin embargo, no estéis alegres porque se os someten los
espíritus; estad alegres porque vuestros nombres están inscritos en el cielo».
Hoy celebramos el Domingo XIV del Tiempo Ordinario, la Jornada de Responsabilidad del Tráfico, y la Fiesta de Santo Tomás.
Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, es conocido entre los demás apóstoles por su incredulidad, que se desvaneció en presencia de Cristo resucitado.
La resurrección de Jesucristo es la predicación de la Iglesia y marca la columna vertebral de todo su existir, de todo su ser, y constituye la esencia misma de su predicación y de su apostolado.
En el Evangelio de Domingo XIV del Tiempo Ordinario leemos el evangelio de San Lucas (Lc 10,1-12.17-20).
Jesús escoge a doce apóstoles para que sean el símbolo del nuevo Pueblo de Dios, la Iglesia, pero continuamente llama.
Al lado de los Doce están los discípulos itinerantes, los 70, que envía de dos en dos.
Jesús recuerda a los 70 que el nuevo Israel seducirá ante todo por su testimonio, y que la paz es posible y que el maligno será vencido.
Pidamos a Dios que nos ayude a seguir y a amar a Jesucristo, y a reconocerlo en nuestros ambientes y en los que nos rodean. Amén.
LA IMPORTANCIA DE LA PALABRA DE DIOS.
La Palabra de Dios es viva y eficaz, más tajante que espada de doble filo, que ilumina la vida de cada hombre y mujer creyentes. Bien sabemos que «el plan de la revelación se realiza por obras y palabras intrínsecamente ligadas…y la verdad profunda de Dios y de la salvación del hombre que transmite dicha revelación, resplandece en Cristo, mediador y plenitud de toda la revelación» (D.V. 2).
LIBROS DE FRANCISCO BAENA CALVO EN BUBOK
CANAL DE FRANCISCO BAENA CALVO EN YOUTUBE